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Por ella

Por ella 22 de Mayo de 1996.

Olvidado diario:

Hoy por fin, voy a volver a ser yo mismo, el yo de antes, sí, en este preciso instante puedo jurar que no voy a dejar de escribirte nunca más, porque por fin me he dado cuenta de que no me podía seguir haciendo tanto daño a mí mismo, bueno..., a mí mismo y a mis seres queridos.
La he abandonado, voy a comenzar una nueva vida sin ella, porque puedo hacerlo, estoy seguro de ello. Quizás suene un poco cruel, después de lo que hemos pasado juntos, pero es lo que más me conviene sin lugar a dudas, sí... Ahora sí que no tengo ninguna duda, la cruel era ella que me hacía la vida imposible sin que me diera por aludido, me hacía enceguecer y me apartaba de todo lo que quería, y quiero..., además me engañaba... Encima me engañaba, la muy..., me enzurronaba, me hacía creer que todo iba a ser mejor a su lado, se aprovechaba de mi desdichada situación y me hacía olvidar de mis espeluznantes y tristes problemas con su consuelo. Me atrapó, y de qué manera..., me sedujo como el diablo nos seduce con sus mañas, con todas sus armas: Su olor, su textura, sus vivos colores y sus formas...

Me hacía olvidar, lograba que me sintiera distinto, mucho menos desgraciado sobretodo... Yo pensaba entonces que ella había sido creada y pensada para mi boca, para mis labios que como si estuvieran poseídos la buscaban en todos los rincones. Primero todo empezó como un juego, pero con el tiempo, sólo le era fiel a ella, me olvidé de mi estupenda esposa, le hice tanto daño..., la dejé..., la dejaba sola por las noches mientras yo hundía mis gozos y pensamientos en el regazo de la otra. Con los días empecé a cambiar, me había vuelto otra persona. Y ella, para que no me cansara nunca, para que no la aborreciera, se citaba conmigo a distintas horas del día, en lugares insospechados, y cambiaba a menudo de imagen, jugaba a este juego porque vio que le daba resultado y me retenía a su lado. Un día iba de rubia, otro me provocaba teñida de rojo burdeos, muchas noches se mostraba fría, otras..., se me calentaba sola, sin casi darme cuenta, pero no por eso dejó de tenerme atrapado con su característico magnetismo. Cada noche acudía a su terreno, noche tras noche, algunos días como te he explicado antes, la veía a otras horas, pero no tardó en exigirme que quería más, que me quería para ella sola, a todas horas, querías poseerme en cuerpo y alma..., yo cedí a sus encantos nuevamente. No iba al trabajo, no jugaba con mis hijos, me cambió aún más el temple, sobre todo cuando no estaba con ella, y cuando lo estaba no era yo...
Incluso pensé en el divorcio, quería separarme de mi esposa..., pues no podía vivir sin la otra, loco andaba a su encuentro, sin pensármelo, y era feliz. Por unas horas era feliz, luego..., más tarde me daba cuenta de que quizás me estaba equivocando, y la idea del divorcio tenía menos furia en mis pensamientos. La vida me hacía daño, y ella era la única que me albergaba y me comprendía, ¡hum!, la única que me endulzaba, ella me recogía y me emborrachaba con su dulce miel. No era amor..., pero la deseaba como un desquiciado, que equivocado estaba diario, como pude caer en su trampa. ¡Cuántas cosas he dejado por ella, he tirado mi vida por el maldito retrete! ¿Cómo voy a recuperar a mi mujer ahora? ¿Y a mi familia?
Pero ya está, ya se han acabado esos días en que sólo me importaba estar con ella, a solas o con más gente, daba igual, pero no sin ella. Lo que más me gustaba es que nunca me pedía explicaciones de ningún tipo, nunca, ella se apoderaba de mí sin preguntar nada, accedía siempre a mi voluntad y a mis deseos..., me embriagaba tanto...
Pero hoy, hoy por fin puedo decir que la he dejado... He dejado la bebida.

* Autora : Comella Firmet

15 comentarios

Comella -

Gracias por tu comentario Addley, es un honor que toda una psicóloga me de el visto bueno a un texto así, porque entonces quiere decir que he conseguido muchas de las cosas que quería transmitir con este personaje y con la manera de narrar su historia.

Merci por tu tiempo y tu amabilidad.

Un cordial saludo.

Comella Firmet

Addley -

Realmente es la primera vez que llego a esta página y me ha encantado lo que plasmas. Soy psicóloga, tengo 24 años, no bebo y realmente es de las pocas veces que un escrito llama tanto mi atención. Felicidades por tener la habilidad para que las personas nos interesemos, comprendamos y realmente decidamos actuar sobre las cosas que dañan tanto a quienes amamos como a nosotros mismo.

Comella -

Muchas gracias Dafne, por descubrirme y por leerme. Es una pena que no dejes e-mail para poder contactar contigo y agradecerte esas bonitas palabras, es precioso que te digan una cosa así. Un abrazo.

COMELLA FIRMET
firmet@yahoo.es

Dafne -

Comella ayer descubri tu pagina y estoy totalmente enganchada, muchas felicidades por ser una persona con fondo y saber transmitirlo

Comella -

Hola Jugador, así que haciendo trampas, ¿eh? :-P Ai, ai, ai. No te preocupes que eso del "scroll" lo hacemos todos, yo la primera :) especialmente si no me interesa demasiado un texto.
En cuanto a lo de me comentas de la "técnica", tienes toda la razón, suelo escribir textos de doble sentido porque me divierte muchísimo jugar con las letras y engañar un poquito al lector. Muchas gracias por tu comentario, un cordial saludo y hasta la próxima ;)

Jugador_S -

Hola, he de reconocer que hize trampas, a mitad del relato hize scroll hasta el final, luego volví a releerlo.

Es la misma "técnica" (entre comillas) , que usaste para tu cuento titulado ... no recuerdo el título, el de alguien que lleva una vida pública en la noche ...la farola.

Comella -

Comellita anda bastante "liá" pero siempre os tiene presentes en su pensamiento y en su corassónggg :P Muchísimas gracias por vuestros comentarios ;) Maribel, la fotiki genial, me encantó. Pronto nos "atizaremos" una rubia bien fresquita para celebrar tu éxitos en los examenes ;)

Maribel -

¿Dónde andas Comellita?

odyseo -

Las adicciones y excesos son siempre malos para el cuerpo y, sobre todo, para el alma, pero sabiendo mantener una cierta disciplina, siempre se puede disfrutar de todo en su justa medida.
Te felicito.

flybutterfly -

Cautivadora historia. Me recuerda el libro "La Insoportable Levedad del Ser" de Milan Kundera. No cabe duda que cualquier addicion: sexo, droga, alcohol, comida, consumismo, etcetera etcetera nos lleva a la destruccion del ser.
Te mando un abrazo volador.

Diablillo -

....................................................................... Perdona que no te haga ningún comentario, pero es que me has dejado sin palabras
BSSSSSSSSSSS ;)

Cacahuet de mar -

Estuuupenduuu Comell@. Me ha gustado... Me has tenido enganchada al relato hasta el final.

Maribel -

Muy bueno Comellita, me ha gustado mucho como la has descrito. Y recuerda que tenemos una rubia pendiente ;-)
Bechitossssssss.....

Comella -

Gracias por tu comentario Dynaheir, es bueno saber que soy apta para todos los públicos ;) Lamentablemente tienes toda la razón, hay gente que se ha destrozado y se destroza la vida cada día con las drogas, la bebida y/o el juego...

Un cálido saludo :)

Dynaheir -

Has expresado muchos sentimientos en este relato. Me ha gustado mucho. Tengo sólo 18 años, pero he vivido muy de cerca como la bebida y las drogas han destruido las vidas de personas muy importantes para mí.

Lo has sabido plasmar muy bien.